La "conserva" conservada...El incombustible cráneo del Chef corellano nos ha vuelto a dar una nueva lección de su ingenio y capacidad de improvisación.
Habida cuenta que la conserva floral, hermética donde las haya, había empezado a crear los más variopintos mohos e, incluso, algún caso de botulismo ha decidido poner manos en harina y preparar un nuevo cocimiento amejorando el guiso, eso si respetando la receta original, que para algo data de 1841 y no es cuestión de perder las esencias patrias.
Hacían falta unos retoques, algún nuevo ingrediente de larga duración que resulte indigesto a los socios de Carlos III, salpimentar un poco con Comptos y Defensor del Pueblo, a riesgo de que la primera de las especies repita más que un pepino de Murcia en Gazpacho de tres días, y listo para el consumo.
De nada parece que va a servir el Txoko que hemos creado en los últimos treinta años con su cocina vitrocerámica , el horno pirolítico y el frigorífico No Frost, de nada los escaños de cuero repujado en Ubrique ni su cambio de ubicación al Paseo Sarasate, de nada las derramas a escote IRPFero que nos ha costado el txiringuito a todos los socios; los que quieren, los que no quieren y hasta a los que no quieren… La fiesta dicen que está prevista para el año entrante, buen motivo para hacer unas elecciones anticipadas y festejar el ascenso a los fogones de la Carme Ruscalleda foral, que cocinar no se si cocina pero a los pamploneses nos tiene fritos.
Pues eso, en un “deja vú” que ya se está haciendo más “pesao” que el “Día de la Marmota” ha decidido prescindir de las instalaciones locales, que ahí meten muchos la cuchara en el guisote y luego no hay quien controle la “locura” final, de mancharse la mandarra nueva y va a encargar un Catering…
Y para sorpresa general, ha decidido encargárselo al Rey del Pollo Frito, el salsero mayor del Reino… PEPIÑO COOKING and FRIED LTD de la mismísima capital de la Villa y Corte, lo que no sabemos todavía es si el postre lo pondrá el afamado Hostelero Pastelero, pero me temo que va a ser que si…
Buen provecho, porque el guisote nos lo comemos a escote, nos guste o no, y si no quieres taza, taza y media…
Patxi Txungur
Habida cuenta que la conserva floral, hermética donde las haya, había empezado a crear los más variopintos mohos e, incluso, algún caso de botulismo ha decidido poner manos en harina y preparar un nuevo cocimiento amejorando el guiso, eso si respetando la receta original, que para algo data de 1841 y no es cuestión de perder las esencias patrias.
Hacían falta unos retoques, algún nuevo ingrediente de larga duración que resulte indigesto a los socios de Carlos III, salpimentar un poco con Comptos y Defensor del Pueblo, a riesgo de que la primera de las especies repita más que un pepino de Murcia en Gazpacho de tres días, y listo para el consumo.
De nada parece que va a servir el Txoko que hemos creado en los últimos treinta años con su cocina vitrocerámica , el horno pirolítico y el frigorífico No Frost, de nada los escaños de cuero repujado en Ubrique ni su cambio de ubicación al Paseo Sarasate, de nada las derramas a escote IRPFero que nos ha costado el txiringuito a todos los socios; los que quieren, los que no quieren y hasta a los que no quieren… La fiesta dicen que está prevista para el año entrante, buen motivo para hacer unas elecciones anticipadas y festejar el ascenso a los fogones de la Carme Ruscalleda foral, que cocinar no se si cocina pero a los pamploneses nos tiene fritos.
Pues eso, en un “deja vú” que ya se está haciendo más “pesao” que el “Día de la Marmota” ha decidido prescindir de las instalaciones locales, que ahí meten muchos la cuchara en el guisote y luego no hay quien controle la “locura” final, de mancharse la mandarra nueva y va a encargar un Catering…
Y para sorpresa general, ha decidido encargárselo al Rey del Pollo Frito, el salsero mayor del Reino… PEPIÑO COOKING and FRIED LTD de la mismísima capital de la Villa y Corte, lo que no sabemos todavía es si el postre lo pondrá el afamado Hostelero Pastelero, pero me temo que va a ser que si…
Buen provecho, porque el guisote nos lo comemos a escote, nos guste o no, y si no quieres taza, taza y media…
Patxi Txungur
